miércoles, 12 de noviembre de 2008

Delicatessen berlinesa I

Después de la estancia en la ciudad de Brema, dejando atrás la cálida frialdad bremense (*) que allí encontré, Adriana y yo nos dirigimos a Berlín en, como no podía ser de otra forma, tren. Por cierto, que ya dije en la anterior entrada que el tren en Alemania está muy bien, pero que barato no es. Hicimos un cambio de tren en Hannover, y no lo perdimos pues yo qué sé por qué.


Aquí vemos un andén de la estación central de Berlín, la inauguraron justo para el mundial de 2006, la verdad que es bastante impresionante; el acero, y el cristal junto con el buen gusto pueden dar buenos resultados.


Una curiosidad: en Alemania se ve a menudo a gente bebiendo tercios de cerveza en el transporte público, no sé si estará prohibido el botellón (si no ya se encarga el tiempo de prohibirlo) pero beber cerveza parece que no, porque la gente -de todo tipo-lo hace bastante y abiertamente. Así que yo no fui menos y fui a por un par de Becks al vagón-cafetería (cómo me gusta lo de vagón-cafetería y el vagón-correo). Una pequeña anécdota que a Adri le gustará recordar: nos tocó sentarnos separados, y yo fui a pedirle al que estaba con Adri que me cambiara el sitio un poco bruscamente, bruscamente no en el sentido de malas formas sino en la máxima brevedad posible; sin darle tiempo a sentarse, y sin preámbulo ni explicación alguna le pedí que me cambiara el sitio. El tío aceptó murmurando no sé qué, y yo, agradecido, le di un pequeño apretón de hombro en plan "gracias, ,tío". Tampoco le gustó. Adri me cogió manía durante 10 minutos, pero se le pasó. Entre pasajeros, cervezas y bollería pues llegamos a Berlin Hauptbahnof, la estación central de Berlín.


Sabíamos que allí había como una oficina de turismo para sacarnos la tarjeta de transporte público para 4 días y la tarjeta de museos, ahora no me acuerdo de los precios pero la de transportes la amortizas pero de sobra porque el transporte es carísimo. En plan, un sencillo para una zona mínima 2,5 € y cosas así. El de los museos, creo que lo amorticé por un leurito con cero sesentaycinco, pero satisfecho quedé viendo los brutalísimos Museos de Pérgamo y Egipcio.Nos costó lo nuestro encontrarla así como la forma de salir de la estación con nuestros maletones hacia el Generator Hostel.


Aquí podemos ver cómo en el Generator rotulan el número de habitación bien grande para que no te cueste leerla si te has pasado con la Bekcs o la Berliner. Es la habitación del Shotta.

El Generator Hostel está bien, es un gran edificio de estilo comunista, con una salvajada de habitaciones, está bastante nuevo, y el precio para lo que uno busca y él ofrece pues no es abusivo. Tiene bastante oferta "festiva" (habría que verla también) pero ya que teníamos casi 3 días para ver Berlín pues a estar lo que había que estar. Está lleno de todo tipo de gente, abundando el joven "modenno". La verdad que una larga estancia allí tiene que dar para muchas cosas. En el poco tiempo que estuvimos por las zonas comunes, vimos sus borrachos, sus perdidos, su tío en bolas y toalla buscando el baño, su espléndida que desayuna en pijama, etc. Sus cositas, Sulamita.


Aquí alzo el puño como un comunista más en el monumento al Soldado soviético. No entiendo el criterio que se sigue para quitar unos viejos monumentos y otros no, yo los dejaba todos. Para hablar claro: el soldado alemán, que era nazi, pero alemán al fin y al cabo, hizo mucho daño por Europa, pero el soldado soviético hizo mucho daño hasta que llegó a Berlín desde Moscú, y siguió haciendo daño, porque además ya no hizo el camino de vuelta. Parafraseando al gran Ganda: "En un mundo en el que aún quedan fascistas y comunistas, bobos siguen preocupándose por listas"


En el largo camino (el resto de días, ya sin maletas, no se hizo tan largo) hasta el Generator pudimos ver lo típico del viernes noche de una metrópoli: los chavales borrachos en el intercambiador, la gente vestida para salir, etc.



Foto en el reloj del Alexanderplatz, al fondo puede verse el pirulí de Berlín, mola que está justo en el centro, imaginaos que el Pirulí de Madrid estuviera en Sol.


Al día siguiente nos propusimos levantarnos a las 8 para ser unos turistas de pro, pero al final, entre pitos y flautas, estábamos en la calle a las 12, y así todos los días. Eh, pero que no pasa nada, al final se ven las cosas, y además, antes de las 12 en Berlín hace mucho frío.Al lado del Generator pasaban 2 tranvías que nos llevaban al centro, a Alexanderplatz, así que ése era siempre nuestro punto de partida.


Adriana viendo por dónde podía ir bien seguir. Como veis, el mapa está al revés, como el libro de Bush el día del 11-S. Es coña, un cyberbesito. ojete flava.

Alexanderplatz es una gran plaza, un gran espacio vacío al más puro urbanismo comunista. Sale en varias películas de ahora ambientadas en Berlín. Adriana llevaba la voz cantante en la organización de los recorridos ya que ella habla alemán y ya había estado en Berlín, ella decidió el recorrido, pero yo quise poner mi granito de arena: una bici tándem.



Instantánea justo antes de que por posar para la foto estampara la bici contra el gentío que cruzaba el paso de cebra en Unter den Linden. Estaba flipado con la tándem, quería fotos.



Me encanta esta foto: se ve a Adriana con la pernera izquierda remangada como una biciclista pro, la gente en bici, al fondo la puerta de Brandenburgo.


La bici tándem era el caldo de cultivo perfecto para la bronquita, pero no, fue todo rodado, doblemente rodado. Fueron 4 horas de pedaleo en las que a alta velocidad de crucero nos dió tiempo a echar una primera visual general de Berlín: la torre de TV, el majestuoso paseo de Under den Linden, puerta de Brandenburgo, el parque
Tiergarten, la zona de las embajadas, Postdammerplatz, etc.


Monumento a la victoria, en el Tiergarten. Se nos pasó subir y nos perdimos dos cosas: unas buenas vistas, y un mensaje que Kike había dejado para la posteridad hace poco para los amigos.



El Berlín más americano en el sector americano, Postadammerplatz.



Cerca de la foto anterior han dejado unos cuantos trozos del muro, la gente escribe y tal, mucho español dejando chorradas como que éramos campeones de la eurocopa. El concejal de turismo de turno ha tenido una brillante idea y ha puesto a un soldado ficticio que te pone un visado en el pasaporte o algo así. Previo pago.

¿Dónde comimos? Justo el sábado ahora no me acuerdo exactamente, pero apostaría que fue en un Alex.


Foto desde el Alex en el Sony Center, un sitio que se han currado los japoneses, con sus pantallones, su escenario, su Museo del cine y de la televisión.


(*) Como pueden apreciar mi traductora favorita y mi apreciado filólogo he aprovechado sus enseñanzas de gente letrada. Voy a seguir preguntando, ¿qué opináis de la palabra "entrada" para ésto? ¿El equivalente en castellano de "post"?

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Por alusiones creo que debo ser el primero en comentar.
La verdad es que Berlin es una ciudad preciosa a la que siempre quise ir y hace menos de 2 meses pude visitarla. Es impresionante (al igual que las frases bien construidas de germi). Un par de apuntes: cuando estuve coincidió con la fiesta de la unificación y todo estaba más que bonito. Me negué a hacerme la foto con el monumento al soldado soviético simplemente por la hipocresía que se tiene a la hora de dejar unos monumentos u otros. También me negué a hacerme la tipica foto de turista con los soldados americano o ruso en la puerta de Brandenburgo (previo pago).
Para mí lo más impresionante fué Postdamer Platz, es increible. No se si estuviste en el monumento en homenaje a las victimas del holocausto pero la verdad es que te deja sin palabras simplemente por la sencillez y a la vez el significado de la obra.
He de reconocer que la zona oeste está más cuidada que la zona este, sin embargo, si volviese a Berlín me gustaría estar en la zona este ya que es mucho más acogedora, barata y me recuerda mucho a La Habana (edificios viejos y grandes avenidas).
te mando al email la pintadita en el monumento a la diosa victoria del Tiergarten (no se si esta bien escrito).
Limemos asperezas, estoy muy orgulloso de ti Germi. La verdad es que no te quiero ver. Tu sabes que tu y yo estamos en contacto a través de la red. En persona se pierde todo el encanto de nuestra Love story.
Un abrazo y cuidate.
Mensaje para adriana: Me he metido a tu fotolog pero no me deja escribir coments pq no soy usuario. Te sigo, no lo dudes.

Anónimo dijo...

Voy a aportar mi granito de arena comentaril(¿?).Me gustan tus relatos,tus anecdotas y sus simpáticos chascarrillos,pero me dijiste que había mucho graffiti y tiendas de zapas y no he visto foto que así lo demuestre;
Hay instantáneas muy guapas,espero una segunda entrega.

Paco,tu amigo de la uni.(has visto que digo amigo y no compañero como en su día se llegó a plantear).

U.B dijo...

Blog cotilleado ya por la Bohe.

Anónimo dijo...

Hola paco! Hola german! Hola Adriana!

Anónimo dijo...

¡Hola Caraka! ¿¿Quién se esconde tras esa identidad?

Anónimo dijo...

Si está la Bohe estoy yo también. Aqui vengo a verte, Mercurio. Espero que se me ocurra algo que escribirte siempre que habras un nuevo post. La otra noche estuvo cojonuda. Yo también tenía ganas de conocerte. Espero que haya más noches como la del otro día. Salú.